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La empresa : “aula” de formación de personas

Semilla de Liderazgo

  La empresa : “aula” de formación de personas

 


Las organizaciones tienen la posibilidad de ser verdaderas “aulas” de formación de personas. No me parece justo que los líderes empresariales esperen que solamente el Estado, las universidades  o la sociedad les provean de personas capacitadas para sus empresas.  La autoridad formal que ostentan los líderes empresariales les brinda una oportunidad única para formar buenos empleados, para sí mismos, y – en un acto de grandeza –  para la misma sociedad, toda vez que lideren con un estilo de liderazgo participativo y motivador.

Un estilo de liderazgo participativo puede lograr que las organizaciones sean excelentes lugares para:

1. Proveer y aumentar conocimientos técnicos. En las empresas generalmente hay mucho conocimiento técnico que puede quedar aislado en la mente de unas pocas personas, a no ser que exista una cultura de formación de personas, de transmisión de conocimientos. Conozco empresas que internamente albergan más conocimientos técnicos o más actualizados que las mismas universidades.

2. Promover valores, responsabilidad y compromiso. La generación de compromiso, responsabilidad y valores es algo que difícilmente puede ser enseñado de manera eficaz en las aulas típicas de enseñanza.  Los líderes de empresas, con sus ejemplos,  tienen en sus manos las herramientas más eficaces para promover valores, compromiso y responsabilidad. Los valores no pueden ser enseñados, sin embargo, pueden ser transmitidos e inspirados. El contacto humano que se da en las empresas es el marco adecuado para que los empleados “absorban” valores.

Una vez, una persona me pidió que capacite a su gente para que actúen “de manera más comprometida”. No se puede capacitar a la gente para que “se comprometa”, lo que se puede hacer es capacitar a los líderes en cómo obtener empleados comprometidos. El compromiso es una decisión personal que ocurre porque una persona está motivada a comprometerse, no porque se le pide, sino porque el entorno le motiva y toma la decisión  que eso es lo que quiere hacer.

3. Desarrollar habilidades interpersonales. Un estilo de liderazgo participativo puede tener gran influencia positiva en la inteligencia emocional de las personas a su cargo. Creo que esto se puede lograr mejor en las organizaciones que en las universidades. El estilo de liderazgo del Jefe  puede limitar, disminuir o aumentar el desarrollo de las habilidades interpersonales de sus colaboradores, incluyendo su autoestima.

4. Inspirar deseos de superación. Las personas se identifican mucho con la actividad laboral que realizan. Ese ímpetu puede ser bien aprovechado en las organizaciones para que los empleados experimenten nuevos aprendizajes, nuevos límites a sus conocimientos y habilidades, y en general a desafiarse a si mismos, a desarrollar habilidades desconocidas y de esa manera superarse como persona o como profesional.

Finalmente, cabe recordar que el crecimiento organizacional solo puede darse cuando las personas de la organización crecen como personas y como profesionales.  Una organización que no promueva el crecimiento de sus colaboradores, que no les provea desafíos o nuevos aprendizajes, difícilmente podrá crecer como empresa.

En resumen, considero a las empresas como un “gran aula” donde los que tienen jerarquía de jefes son los “profesores” (lo sepan o no, lo admitan o no) y sus colaboradores los “alumnos”. En  las empresas hay suficientes oportunidades para formar personas, toda vez que exista un liderazgo incluyente y participativo que les motive a superarse.

Semillas de  Liderazgo son :

√ Útiles, formativas y orientadas a facilitar el trabajo con personas  en el ambiente laboral

√ Fruto de nuestras investigaciones y experiencias desarrollando lideres por mas de 20 años

√ Parte de nuestros materiales de capacitación que ofrecemos como aporte a la comunidad.